Plazo para presentar cambios termina el miércoles 6 de agosto.
La Asamblea Legislativa avanzó a paso lento este miércoles 30 de julio en la discusión del proyecto de jornadas laborales 4-3, bajo el expediente 24.290. Durante la octava sesión del proceso de vía rápida, se discutieron únicamente cinco mociones, todas rechazadas por mayoría.
Desde el arranque del trámite el pasado 7 de julio, el ritmo ha sido similar. En esta ocasión, los legisladores abordaron las mociones del número 39 al 43, de un total de 2.564 presentadas.
Frente Amplio mantiene oposición activa
La fracción del Frente Amplio, autora de la mayoría de mociones, continúa usando al máximo el tiempo reglamentario para defender sus enmiendas. Varios de sus diputados intervinieron para hablar tanto a favor como en contra de las propuestas.
También participaron en la sesión legisladores como Daniela Rojas, proponente del proyecto y diputada del PUSC, así como los independientes Gilberth Jiménez, Johana Obando y Kattia Cambronero.
La sesión extraordinaria de la mañana, iniciada a las 9:15 a.m., fue la única dedicada al tema este miércoles. La sesión ordinaria de la tarde se reservó para debatir la resolución de la presidencia del Congreso sobre el eventual levantamiento de la inmunidad del presidente Rodrigo Chaves.
Proyecto volvería a discutirse el jueves
La discusión del expediente 24.290 se retomaría el jueves por la mañana. Por la tarde, el Gobierno desconvocaría el proyecto, ya que se espera la votación en segundo debate del empréstito de $500 millones con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF).
Cronograma apretado y presión sobre otros proyectos
Si el cronograma se mantiene sin cambios, las 14 sesiones del procedimiento de vía rápida concluirían el próximo miércoles 6 de agosto. A partir del jueves 7, entraría a regir la conocida "guillotina", lo que significa que ya no se podrán defender más mociones y únicamente se votarían las pendientes.
Esto implica que quedarían más de 2.500 mociones por votar, lo cual podría consumir gran parte del periodo de sesiones ordinarias, que inicia el 1° de agosto. Este escenario amenaza con frenar el avance de otros proyectos clave en la agenda legislativa.
Ante esa situación, algunos sectores legislativos han planteado la posibilidad de detener el trámite de vía rápida para liberar tiempo y avanzar con otras iniciativas. Sin embargo, por ahora no existe consenso para frenar el proceso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario